Recientemente, la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) daban este dato: un tercio de los alimentos para el consumo humano acaban en la basura o desaprovechados.
En España, el dato del panel del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación indica una tendencia al alza en el desperdicio con un volumen de 1.339 millones de kg/l de alimentos y bebidas, de los que un 46% fueron frutas y hortalizas en 2018.
Con el fin de ir poniendo freno a esta tendencia se ha producido una eclosión de empresas emergentes y plataformas que, con la tecnología de una apps, ponen en contacto a consumidores, establecimientos o distribuidores para aprovechar alimentos que de otra forma terminarían en mal estado y de ahí a la basura.
Estas son algunas:
Yo no desperdicio: Iniciativa que parte de una ong que pone en contacto tanto a los que pueden suministrar alimentos excedentarios como a aquellos que necesitan recibir alimentos, pensemos por ejemplo, en los comedores sociales. Tienen versión para Android y iOS.
Too Good To Go otra aplicación para evitar el desperdicio alimentario en el sector de la restauración o con tiendas. Con esta app los/as usuarios/as pueden comprar la comida que diariamente queda en las cocinas de restaurantes, hoteles y demás negocios dedicados a la restauración, a un precio muy reducido. Además han creado el movimiento #Lacomidanosetira, formado por los que llaman ‘waste warriors’ para agrupar iniciativas que buscan la recuperación de los alimentos.
Food and save: Creada desde Baleares persigue el mismo objetivo y pone en contacto establecimientos y aquellos que quieren comprar paquetes de comida a un menor precio. Cada día los locales conectados ofrecen los productos que no han sido vendidos durante el día.
We save eat: Los usuarios de esta app se autodenominan SAVERS! e igualmente a través de esta app se ponen en contacto establecimientos y consumidores hasta agotar las existencias del día.
Tapper: Localizada en Cataluña. Con un funcionamiento similar a las anteriores. El usuario se descarga la app y mediante la geolocalización de su smartphone busca qué establecimientos han puesto sus productos para evitar ser desperdiciados. Una vez el usuario encuentra el producto deseado, lo reserva desde la app e indica la hora en que pasará a recogerlo..
Olio: Parte del Reino Unido pero con un espíritu más global está activa en casi 50 países. Olio conecta a voluntarios capacitados con comercios locales de comida para rescatar y distribuir los alimentos, y se puedan aprovechar en otros espacios.
Encantado de comerte: Otra plataforma en la que se publican ofertas de alimentos que los comercios no han logrado vender a lo largo del día, y que los usuarios/as pueden comprar con un descuento de mínimo el 40% .
Red Alimenta: Una red de voluntarios desde Toledo que a través de un trazado de rutas recogen en restaurantes el excedente y de ahí acuden a los domicilios de los vecinos que ese día van a aprovechar ese excedente.
Soy la comida perfecta: Recuperan comida que el mercado convencional rechaza por no cumplir una serie de especificaciones: alimentos que tienen el empaque dañado, frutas y verduras que son consideradas «feas» o alimentos cuya fecha de caducidad o fecha de consumo preferente es próxima.
Nooddle: una aplicación que ayuda a cocinar para no desperdiciar comida. Únicamente indicando los alimentos que hay en la nevera, la plataforma recomienda una serie de recetas sanas y saludables, que suelen ser sencillas de elaborar y además incluye diferentes opciones, como recetas vegetarianas o sin gluten.