¿Cómo crecerían las plantas en la Luna donde la gravedad es seis veces menor que la de la Tierra?
Esa fue la pregunta que se plantearon unos jóvenes universitarios de Málaga y de la que surgió Green Moon Project a principios de 2016 para lograr la germinación de la semilla y posterior crecimiento del tallo de la planta bajo los efectos de la gravedad lunar.
Desde entonces, tres claves fundamentan el proyecto: la geología planetaria, la ingeniería aeroespacial y la biología vegetal encaminado todo para diseñar los futuros cultivos espaciales
Aquel grupo de universitarios, liderado por José María Ortega, presentó su propio diseño de cápsula, un germinador lunar robótico, al concurso organizado por Team Indus dentro del Google Lunar X Prize, en el que compitieron junto a otros 3.400 proyectos y fue seleccionado como el único equipo español que alcanzó la clasificación internacional de 15 proyectos finalistas en Bangalore (India) el 15 de marzo de 2017.
Desde entonces y hasta la fecha, Green Moon Project ha ido evolucionando y es hoy una plataforma compuesta por múltiples investigadores españoles con una sólida formación capaz de dar una respuesta consistente en temas astrobiológicos y espaciales.
Colaboración china
Además, tras conocerse que China había conseguido plantar la primera planta en la Luna en enero de 2019 y debido al parecido con la cápsula que Green Moon Project había desarrollado y presentado en aquel concurso, solo faltaba alcanzar las sinergias que se alcanzaron a finales de ese año con un acuerdo firmado con el Centro Chino de Exploración Espacial.
Además, ya se están realizando algunos ensayos en la isla de Lanzarote, dada la similitud con la superficie lunar por sus componentes basáltico y volcánico.
El objetivo es que, en unos dos años, se pueda colocar en la Luna el primer invernadero para cultivar hortalizas.
Green Moon Project cuenta desde 2017 con el apoyo de empresas andaluzas como Grupo Herogra e Indoplant, que están elaborando fertilizantes especiales, además del Instituto de Geociencias (IGEO) y la Red Española de Planetología y Astrobiología.