
Entrevista a Hans van Es, Director de la Asociación de Productores de Holanda (DPA)
El director la Asociación de Productores de Holanda (DPA), Han van Es, relata las similitudes entre los productores holandeses y españoles. Igualmente, expone los cambios que se han producido en los últimos años en la horticultura en su país y cómo éstos también se irán produciendo en el sector almeriense.
- «Almería y Holanda son países complementario. Los dos son muy innovadores y ambos están continuamente desarrollando tecnología nueva»
- «El sector almeriense tiene un potencial enorme y es capaz de realizar grandes cambios muy rapídamente»
1.- ¿Cuál es su impresión del sector hortofrutícola de Almería?
-Lo conozco desde hace más de 15 años y sé que tiene un potencial enorme y que está cambiando muy rápidamente. He comprobado que Almería puede realizar cambios muy grandes con cierta facilidad. Holanda y España tienen en común que ambos viven de la exportación, y que en las dos zonas la horticultura es el motor que mueve la economía.
DPA está formada por 14 socios. En mi opinión son demasiados y lo ideal sería que se redujeran a tres o cuatro para poder negociar con las grandes cadenas de supermercados. En España, no solamente en Almería, puede haber entre 500 y 600 organizaciones, por lo cual también tienen que haber un proceso de concentración empresarial. La situación en 10 o 15 años va a ser totalmente diferente.
2.- ¿Cuáles cree que son los principales puntos en común del sector hortofrutícola de Almería y el de Holanda?
-Los dos países son complementarios. Los dos son muy innovadores y los dos están continuamente desarrollando tecnología nueva para el sector. Para mí, en un futuro no se va a hablar de competencia entre países sino que se va a hablar de competencia entre cadenas de productores porque es muy importante que se pueda suministrar durante todo el año a los clientes. Lo más lógico es que exista colaboración entre empresas de diferentes países (como Holanda, Bélgica, Francia y España, entre otros) que van a estar en competencia con otros grupos de empresas que también colaboran a nivel internacional.
En el pasado, los agricultores estaban muy orientados a nivel local. Esto ya ha cambiado. Hasta los agricultores se defienden más en otros idiomas y poco a poco se establecerán colaboraciones comerciales para competir con las cadenas de producción. En Holanda, se están produciendo colaboraciones entre agricultores que se complementan entre sí para poder servir a sus clientes y la lógica dice que esas colaboraciones van a pasar la frontera.
3.- ¿Cuáles son los principales temas que nos separan?
-Hay diferencias culturales. Por ejemplo, los holandeses son muy directos. Si en Holanda haces negocio las citas son muy puntuales y llegas y haces negocio. Aquí mucha gente prefiere tomar un café y poco a poco conocerse y luego llegar así a un negocio. La forma de hacerlo de los holandeses «tan cuadrados» puede ser un hándicap en algunas ocasiones. A nivel técnico, los productores se entienden perfectamente porque no hay tanta diferencia de producir un tomate aquí o en Holanda.
4.- ¿Cómo podemos colaborar para defender los intereses comunes del sector hortofrutícola de Almería y Holanda en la UE?
-En este momento en Bruselas hay colaboración conjunta a través de varias organizaciones como COPA-COGECA donde están representados los sindicatos y las cooperativas (con Cooperativas Agro-alimentarias de España). Ésta es una estructura que existe. Es evidente que a nivel de producción existe una colaboración muy importante. Por ejemplo, en la subasta de Venlo se subasta producto español Y en invierno se ve el aparcamiento de las comercializadoras holandesas lleno de camiones de España.
-¿Cómo valora la reciente creación de la Federación Holandesa de Asociaciones de Frutas y Hortalizas?
-Está impulsada por el ex-Ministro de Agricultura de Holanda, Cees Veerman, quien está intentando coordinar asuntos que afectan al sector. Se ha llegado a la conclusión de que hay algunos procesos de innovación necesarios en la agricultura holandesa.
-¿No hay peligro de que esa organización nueva quiera asumir papeles que le correspondan a DPA?
-DPA también ha estado en ese proceso y ha habido discusiones sobre esta nueva asociación. Pero existen varias razones por las que es beneficiosa la creación de la misma para asuntos comunes. Se va a formar un banco de los invernaderos viejos para evitar que éstos caigan en manos de especuladores que le puedan dar otro destino. El objetivo es conservarlos para la horticultura y garantizar que donde hay invernaderos viejos van a seguir teniendo un destino hortícola.
En realidad, más que competir se habla de colaborar en este proceso costoso y complejo de innovación. La tecnología alimenticia se está desarrollando de forma vertiginosa. Existen tantas líneas de investigación que van a necesitar atención. Por ejemplo, se están desarrollando alimentos a medida: Te toman una foto de tu ADN y te dicen el alimento que tu organismo necesita. De momento, eso no se traduce en muchas cosas prácticas, pero tenemos que estar muy al corriente de las nuevas oportunidades que surgen.
Elegir el mercado que quiere servir
En el mercado hay espacio para todos. Los productores van a tener que elegir hacia donde se van a dirigir. Hay agricultores que pueden servir a un mercado local a escala pequeña, por lo cual perfectamente puede haber espacio para empresas familiares. Otros, van a elegir aumentar su escala para poder servir al mercado internacional. No quiere decir que uno es mejor que otro, sino que son diferentes los clientes que buscan y los mercados.
No es un proceso fácil, va a costar mucho trabajo, sangre, sudor y lágrimas. Holanda ha pasado por un cambio muy importante en ese sentido también. En 1996 The Greenery tenía 11.000 socios agricultores en total. Ahora mismo solo tiene 460, trabajando casi la misma superficie, porque la escala ha cambiado mucho. El productor más grande de tomate actualmente tiene un movimiento anual económico de 85 millones de euros. Entre los 11.000 socios que había antes, había de todo: agricultores profesionales y también profesores de escuela con tres o cuatro manzanos en su jardín. Los no profesionales han salido.
Además, ha habido una diversificación, porque ya no todos los productores en Holanda están en The Greenery, sino que han formado otras agrupaciones de productores. Todos los países en Europa van a pasar por ese proceso, y lo que se está viendo en el este de Europa es que está todo por empezar.