Jan van der Blom trae en esta ocasión un sencillo «culticonsejo» para evitar que unas gotas de lluvia puedan mermar o echar a perder una buena parte de la producción de los invernaderos.
Se trata de la colocación de unas canaletas en el interior del invernadero a lo largo de los puntos de alambre. Esta solución permite que las plantas eviten las goteras de esos puntos que pueden malograr gran parte de la cosecha.