La digitalización del agua

DIGITALIZACION DEL AGUA OK

En 2022 se cumplen 50 años del montaje de la primera instalación de riego por goteo en Almería, sin duda un hito histórico para la eficiencia y el ahorro de agua en los cultivos. En este periodo el invernadero solar almeriense ha conseguido ser un referente y un ejemplo mundial.

La tecnificación del riego ha llevado a que Almería tenga una huella hídrica 20 veces menor que la media española, sin embargo, seguimos con déficit hídrico.

Las condiciones ambientales en Almería son envidiables, ya que las temperaturas medias en invierno son suaves, y el número de días de sol al año se aproxima a 320. Un clima perfecto para el cultivo de hortalizas en invierno. Sin embargo, esto tiene una contrapartida: la escasez de precipitaciones.

La falta de agua no es nueva, así se recoge en el libro de agricultura Tratado de Agricultura, de Ibn Luyun, escrito en la primera mitad del siglo XIV. El pensador almeriense describe el sistema de enarenado, el cual tiene muchas ventajas agronómicas: Una de las más importantes es reducir la cantidad de agua necesaria para cultivar. Es posiblemente la primera acción innovadora para el ahorro del agua.

Diferentes fuentes de agua para el riego:

Aguas subterráneas 

Históricamente la principal fuente de agua de la provincia. Pozos cuyos aportes vienen principalmente de las sierras de Gádor, Filabres, Sierra Nevada y Sierra Alhamilla. Los aportes que llegan a los acuíferos no cubren las extracciones de agua y esto ha provocado que los pozos hayan sido sobreexplotados, degradando así, sus aguas con nitratos y sales. A estos recursos naturales se les ha apoyado con otras fuentes de suministro.

Pantanos

Los pantanos operativos en la provincia son: el de Benínar y Cuevas del Almanzora, ambos sobredimensionados. No se cumplieron las expectativas en aportaciones hídricas. A día de hoy, su agua embalsada es del 17% (Benínar) y 22 % (Cuevas). Y no se prevé la construcción de nuevos pantanos.

Trasvase Tajo-Segura

En 1979 llegó el trasvase Tajo-Segura al Norte de la provincia. En la actualidad se encuentra en una situación de crisis permanente debido a la sequedad de las cabeceras de ambos ríos. Concretamente aportan unos 15 Hm3.

El plan hidrológico del 2001 y sus sucesivas modificaciones trajeron consigo nuevos recursos hídricos, con el fin de eliminar el déficit hídrico y aliviar la sobreexplotación de las aguas subterráneas.

Desaladoras

Las desaladoras o el trasvase del Negratín fueron los nuevos aportes de agua al sistema de riego, y descartaron otras como el trasvase del Ebro. Entre las desaladoras de la provincia destacan: la desaladora de Carboneras produciendo 42 Hm3/año. Durante años fue la más grande de España, por otro lado, la desaladora del Campo de Dalías produce 30 Hm3 /año. 

El resto no están operativas como: Rambla de Morales o del Bajo Almanzora, o bien no aporta mucha agua para el riego como: la desaladora de Almería ciudad.  

Otra actuación a mencionar es la construcción del trasvase desde el pantano del Negratín-Almanzora, aportando un refuerzo a los regadíos del norte llegando hasta los 43 hm3/año. Actualmente está al 32 % de su capacidad, por lo que posiblemente no se pueda desembalsar la cantidad prevista. En el verano del 2021 el pantano se encontró tan falto de agua que no se pudo trasvasar.

Sin embargo, y a pesar del incremento de la disponibilidad de agua, el resultado mantiene el déficit hídrico y los pozos siguen degradándose.

Hasta ahora todos los planes hidrológicos han ido por detrás del desarrollo empresarial, manteniendo el déficit hídrico alto, y la sobreexplotación de las aguas subterráneas, por lo que se presentan algunas alternativas:

  • Se debe de seguir incrementado la inversión, generalizar el uso de la tecnificación y la digitalización en todo el ciclo del agua de la provincia. No solo en los campos de cultivo, sino que además en la distribución. Con la finalidad de mejorar su eficiencia, reduciendo las fugas, monitorizando y micro sectorizando la red de distribución; y así facilitar la actuación. Y por último renovar las infraestructuras para mejorar la eficiencia energética.
  • Las desaladoras deberán seguir invirtiendo en nuevas tecnologías con la finalidad de reducir los costes de desalación y conseguir más eficiencia. Implantar sus propias plantas de energías renovables, y así no depender de las fluctuaciones de los precios de la energía.
  • Actuar en las sierras de Gádor, Alhamilla, Filabres y Sierra Nevada. Zonas de acopio de agua para los acuíferos. Realizando infraestructuras para evitar la pérdida de suelo y mejorar la infiltración.
Explorar alternativas a las fuentes de agua

Economía circular del agua, es decir, volver a utilizar el recurso una y otra vez de forma semejante al ciclo del agua en la naturaleza. En este sentido la provincia tiene mucho potencial de mejora.

  • En las zonas del Poniente y en Almería capital se podrían recuperar 40 Hm 3/año. Con un coste inferior a la producción de agua desalada.
  • Reutilizar parte del agua de la balsa del sapo (Las Norias, El Ejido). Se lleva años bombeando, con un tremendo coste energético y desaprovechando el agua.
  • Sin ánimo de abrir de nuevo la guerra del agua entre regiones y siguiendo siempre criterios socioeconómicos y medioambientales. ¿Por qué no rescatar el trasvase (alternativo) desde el río Ródano y Ebro?

mapa trasvase Ródano

Si se realiza el trasvase mediante tuberías por el mar tomando la captación desde los deltas de ambos ríos, no sería necesario la construcción de grandes infraestructuras, ni se tendrían grandes necesidades energéticas. Todo ello, respetando los caudales ecológicos. En un periodo corto se podría disponer del agua de estos, en toda la cuenca del Mediterráneo. 

¿Queremos y podemos seguir creciendo hasta el infinito? ¿Es sostenible este modelo de crecimiento? Son preguntas que debemos contestar, pero cuidado con la elección del modelo empresarial y del desarrollo, debido a que los clientes tienen claro el tipo de modelo. Para ello es necesario un plan de desarrollo provincial: a corto, medio y largo plazo, en cuya elaboración deben participar todos los agentes implicados para la planificación del crecimiento (si es posible), basado en criterios ambientales y socioeconómicos.

Y además se deben incrementar las políticas que incrementen los recursos privados y públicos, con la finalidad de generalizar la digitalización y tecnificación del ciclo del agua. 

Tengamos siempre en cuenta que el agua es un recurso natural, público, esencial y finito.

Juan Antonio Sánchez

Director Técnico de Proyecta Ingenio.

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