
Las previsiones nacionales de producción de aceite de oliva rondarán las 1.600.000 toneladas, lo que representa más de la mitad a nivel mundial y las tres cuartas partes de la producción europea, según las últimas estimaciones de producción por parte de la Comisión Europea que han recogido Cooperativas Agro-Alimentarias de España.
A pesar del retraso en el inicio de la recolección y de los bajos rendimientos alcanzados durante los primeros meses de campaña, la evolución está siendo óptima, con unas expectativas de producción durante diciembre que podrían marcar una cifra muy importante para este mes.
La Comisión Europea confirma el acusado descenso que sufrirán las producciones de los principales países productores como Italia, que rebaja sus expectativas hasta las 205.000 toneladas, con una caída de más del 50% respecto a la campaña anterior. Grecia reducirá un 35% su producción situándose en el entorno de las 225.000 toneladas, y Portugal lo hará en prácticamente un 20%, con 110.000 toneladas.
Fuera de la Unión Europea, el Comité Oleícola Internacional, COI, publicaba el pasado mes de noviembre que Túnez prevé reducir su cosecha hasta las 120.000 toneladas, un 57% menos que la pasada campaña, y Turquía caería hasta las 180.000 toneladas. Tan sólo para Marruecos prevé una cifra superior a la de la campaña anterior que se situó en 140.000 toneladas.
Ante este panorama, es previsible que las salidas de aceite al mercado se comporten de forma ágil ante la necesidad de los compradores internacionales de acudir a España para abastecerse de aceite y así cubrir su déficit de producción, pudiendo aproximarnos, o superar, la cifra récord de exportaciones alcanzada en la campaña 2013/14, que fue de 1.100.000 toneladas.