P.- ¿Qué cultivos ha tenido usted en la finca esta pasada campaña?
Durante muchos años he sido de calabacín, pero este año me pasé al pimiento, buscando un cultivo más tranquilo, en el que no tuviese que estar todo el día encima. Así que puse california rojo y amarillo, hasta febrero; y después melón galia. ¡Llevaba 18 años sin poner melón!
P.- ¿Y repetirá este próximo año?
Para primavera aún no lo sé, pero para el ciclo de otoño-invierno sí. Otra vez pimiento california. Para el 20 de julio pondré el rojo y para el 27 de este mismo mes el amarillo.
P.- ¿Lo determina con mucha antelación?
En la cooperativa en diciembre los agricultores informamos de lo que queremos poner. Y la cooperativa nos dice cuáles son las tendencias, lo que pide el mercado, cómo tiene la planificación y así lo vamos encajando.
P.- ¿Mucho tiempo en Cohorsan?
Casi una vida. Más de veinte años.
P.- Le preguntaba a Josep cómo son las vacaciones de un técnico, y le pregunto a
usted, ¿cómo son las de un agricultor?
Coincido con él en el deporte. Me gusta la bicicleta y en verano es un momento bueno porque dispongo de más tiempo. Luego también me gusta viajar. Todos los años la cooperativa organiza viajes y es una magnífica oportunidad para conocer otros lugares. Viena, Praga, Budapest o Bruselas, fuera de España; y dentro, Ibiza o las Canarias.
P.- ¿Y este año?
Pues un crucero por el Mediterráneo. Algo excepcional.
P.- Luego vuelve con las pilas cargadas. Ahora estamos en su finca, totalmente
ocupada por plásticos, ¿cómo es la desinfección?
Uso plástico de 80-100 galgas, de espesor. Y aquí se alcanzan a mediodía los 70 grados. Con esas temperaturas puedo desinfectar bien el suelo. Alrededor de un mes con los plásticos, solarizando. Y después, unos quince días antes de los trasplantes de pimiento, quito los plásticos y los llevo a la planta de reciclaje. Dejo el suelo cuatro o cinco días sin regar para ir quitándole temperatura. También blanqueo por el mismo motivo. Y otra tarea
es revisar bien todos los goteos para cambiar los que no funcionen bien.
P.- ¿Y así una campaña más?
Otra campaña más, sí. Y seguiré en pimiento, ya no me cambiaré a calabacín, aunque
este último año el calabacín ha tenido sus mejores precios.
P.- ¿Le gusta el pimiento?
Sí porque me permite estar más tranquilo. Para el calabacín hay que estar más joven (risas) porque te obliga a estar todo el día pendiente del cultivo. Es una planta que va muy rápido. En cambio el pimiento se puede regular mejor y te permite conciliar tu vida personal con tu trabajo.